Como usar un concentrador de oxígeno a domicilio

Llenando tanques de oxígeno liquido. Estos tanques, de una capacidad de 46 litros, rinden el equivalente de 40 000 litros de gas. El oxígeno se mantiene a una temperatura de -183°. El peso de un tanque lleno es de 80 kg

 

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Durante cinco años trabajé en una empresa de asistencia respiratoria a domicilio, en calidad de técnico en la instalación de equipos de oxigenación y dispositivos de ventilación asistida. Si este período ha terminado para mí, la actual pandemia del COVID me impulsó a escribir este artículo destinado a asesorar a cualquier persona que necesite usar oxígeno en casa, para sí mismo o para sus familiares.

Permítanme decirles para empezar que no soy médico. Sin embargo, mi experiencia del día a día con pacientes en sus hogares y mis conocimientos de los equipos de oxigenoterapia pueden ayudarle para instalar correctamente un dispositivo y evitar algunos errores comunes que he podido observar al visitar a los pacientes en sus hogares.

Empezaré con dos advertencias, una sobre la dosis de administración del oxígeno y la otra sobre las precauciones de uso relativas al uso de este gas comburente: 

 "Tratar de ayudar a una persona aumentando el flujo de oxígeno hasta que se sienta bien o alcance el 95% de saturación es algo que no se debe hacer".

Aunque presente en el aire ambiente, el oxígeno médico se debe considerar como un medicamento. Utilizado en concentraciones demasiado altas sin el control de un médico puede ser perjudicial para el paciente y causar daños al sistema respiratorio.

El oxígeno debe normalmente ser prescrito por un neumólogo que determina una dosis en función el estado del paciente y de los resultados de los análisis que ha realizado. El especialista establecerá una prescripción estipulando la dosis de oxígeno a administrar. El flujo se indica en litros por minuto, durante un plazo horario determinado. Por ejemplo, una receta puede ser de 2 litros por minuto durante 8 horas al día. En este caso el paciente deberá acomodar sus hábitos para respetar lo mejor posible las 8 horas prescritas, sin modificar el flujo sin la aprobación del prescriptor. Si el flujo le parece insuficiente, debe contactarse de nuevo con su neumólogo, quien podrá autorizarle a ajustar el flujo por teléfono, o pedirle que vuelva al consultorio si lo considera necesario.

"El oxígeno puede provocar incendios o ocasionar quemaduras graves ". 

El oxígeno es un comburente que se utiliza junto con el hidrógeno para impulsar los propulsores de los cohetes y con el acetileno para alimentar las antorchas. Facilita la combustión hasta el punto de hacer combustibles ciertos materiales que normalmente no lo son en el aire ambiente. Por este motivo, el oxígeno médico no debe usarse en la cocina o cerca de cualquier lugar que pueda contener productos grasosos, producir llamas o chispas. Pero también es necesario prescribir cualquier uso de productos o cremas que contengan aceites o grasas en la piel del paciente. El oxígeno puede causar autocombustión incluido sin fuente de calor cercana. En caso de irritación o sequedad relacionada con el uso de oxígeno, nunca use vaselina o crema hidratante ordinaria, comprese en farmacia una crema específica no grasosa compatible con tratamiento con oxígeno.

¿Oxígeno líquido, cilindros de oxígeno o concentrador de oxígeno?

El oxígeno líquido o comprimido en un cilindro constituye una reserva de oxígeno que se vaciará al ritmo del flujo regulable por una válvula. En todos los casos hay un indicador para comprobar la capacidad restante. Las ventajas son que se pueden usar en cualquier lugar sin electricidad y son silenciosas. El inconveniente es que se deben recargar con frecuencia, especialmente para cilindros de oxígeno que tienen poca autonomía a alto flujo.

El concentrador de oxígeno en sí mismo no produce oxígeno: lo separa de los otros gases contenidos en el aire ambiente. Si funcionaría en una habitación estanca, el volumen de oxígeno en la habitación no cambiaría. La ventaja del concentrador es que no requiere ninguna recarga y es inagotable: puede funcionar 24/24 y 7/7 durante meses.

¿Como elegir el material de oxigenación? Todos estos aparatos rinden un oxígeno puro de más de 90%, por este motivo no es un criterio a considerar. De mi conocimiento, en Lima el oxígeno líquido no se utiliza en casa o es muy poco usual. El suministro por cilindros de oxígeno es actualmente peligroso en el Perú por el riesgo de contagio por el COVID al momento de hacer la cola, en medio de personas que están en contacto con personas infectadas. Por estas razones realmente recomiendo evaluar la compra de un concentrador de oxígeno (que Ud. podrá venderlo cuando Ud. Se habrá recuperado de salud). Así tendrás una fuente de oxígeno 100% autónoma y confiable, y más que todo no tendrá que correr riesgos para recargar su cilindro de oxígeno. Recomiendo también la compra de un cilindro de oxígeno con suficiente autonomía para tenerlo lleno en caso de que haya un corte de energía, y de tener la posibilidad de llevárselo dentro de un vehículo en caso de deber movilizarse.

Instalación de un concentrador de oxígeno médico a domicilio

Cuando reciba el equipo en su casa, primero verifique que todo esté completo y que todo esté funcionando (antes de que se vaya el repartidor). Elija la ubicación (o las ubicaciones) donde se podrá colocar la fuente de oxígeno. En una habitación, prefiera la esquina opuesta a la puerta de entrada, para evitar que una persona se tropieza con las tuberías, lo cual es muy desagradable para la persona que lleva la cánula nasal, y para evitar una caída. Bajo ninguna circunstancia se debe colocar la fuente de oxígeno en un armario o en una habitación muy pequeña. En el caso de un concentrador de oxígeno solo se debe enchufar en cualquier tomacorriente, ubicar el botón de encendido / apagado y que sea un tanque, un cilindro o un concentrador, primero asegúrese de saber cómo abrir / detener el flujo y ajustar el flujo deseado. Para verificar que sale el flujo de oxígeno se puede acercarse sus labios (sin lápiz labial, no se olvide las instrucciones de seguridad) para sentir el aliento del oxígeno. También puede simplemente sumergir la manguera o la canula en un vaso de agua para comprobar que el dispositivo funciona correctamente.

Accesorios y descartables: 

• Cánula nasal: tubo que termina en dos pequeños tubos paralelos que se introducen en la nariz. Existe un buen sentido de uso, el pequeño piso de la cánula se coloca contra el surco naso labial. Luego pasamos el tubo por encima de las orejas, lo rodeamos y ajustamos el tubo por debajo del mentón mediante un anillo deslizante. Las cánulas nasales se cambian con frecuencia, en principio cada semana, esta frecuencia puede variar según el consumo de oxígeno. Las cánulas nasales se ponen a endurecerse con el uso bajo el efecto del oxígeno, así que se recomienda tener unidades de repuesto en cantidad suficiente.
• Manguera: sirve como una extensión para tener más libertad de movimientos. También da la posibilidad de alejar su concentrador en la habitación vecina para evitar escuchar el zumbido del motor. Estos tubos miden generalmente de 1m80. No exagere la longitud total de los tubos de extensión para evitar fugas y pérdida de potencia de flujo.
• Conexión de tubería: pequeña pieza de plástico duro en forma de hueso de aceituna perforado, utilizada para realizar conexiones entre tubería-tubería o tubería-cánula de oxígeno. Guárdelos fuera del alcance de los niños y las mascotas, ya que son piezas pequeñas esenciales que se pierden fácilmente.
• Conector de manguera con rosca interna: se coloca directamente en la salida de oxígeno del concentrador y permite la conexión de la fuente de oxígeno - manguera o cánula de oxígeno. Debe tener uno o dos de repuesto, ya que pueden romperse o perderse accidentalmente. Permanece conectado permanentemente en uso sin humidificador, y ser removido para un uso con un humidificador.
• Codo metálico roscado en ambos extremos: se utiliza para instalar un humidificador cuando la salida de la fuente de oxígeno es horizontal (el humidificador se utiliza verticalmente.
• Humidificador: botella cilíndrica de medio litro que sirve para humedecer el oxígeno. La cánula o el tubo se conecta sobre la tapa que tiene un pequeño tubo de salida. El humidificador no es obligatorio a bajo flujo. Sin embargo, se instala casi sistemáticamente a partir de los 2 l / min. El oxígeno es un gas más seco que el aire y muy oxidante. Cuanto mayor es el flujo, más molesta al paciente la sensación de ardor. A menudo hay sangrado o hasta lesiones en las paredes de las fosas nasales causadas por esta sequedad agresiva. El humidificador se llena aproximadamente hasta dos tercios de su capacidad con agua esterilizada. El agua se irá consumiendo poco a poco, da igual si se escurre por completo, salvo por supuesto la sensación de sequedad que se volverá a sentirse. Se debe tener cuidado con el uso del humidificador, porque se debe llenar y limpiar con frecuencia (moldes se instalan fácilmente en este ambiente húmedo enriquecido con oxígeno), lo que implica manipulaciones frecuentes. Cuando la tapa se atornilla incorrectamente se ocasionan fugas, y puede suceder que el extremo de espuma del burbujeador se obstruya parcialmente, provocando una pérdida de potencia de flujo.

El oxímetro de pulso

El oxímetro de pulso, o pulsioxímetro, es un dispositivo que se puede conseguir fácilmente en Lima (entre S / .60 y S / .100). Se coloca de la misma forma que una pinza de ropa en la punta de cualquier dedo y en unos segundos indica el porcentaje de la saturación en oxígeno y las pulsaciones. Tenga en cuenta que el esmalte de uñas a veces puede impedir una medición correcta.

El nivel de saturación normal de un ser humano está generalmente entre el 95% y el 99%. Pero más que el resultado que puede medir a diario, sirve para detectar variaciones inusuales (caída significativa de la saturación y / o aumento de la frecuencia cardíaca en reposo) que pueden alertarlo y alentarlo a consultar a su neumólogo.

El oxímetro de pulso le ayuda para asegurarse de que su cuerpo esté absorbiendo correctamente el oxígeno (lo que comprueba que haya instalado los dispositivos correctamente). Este control de rutina yo lo efectuaba en cada visita a domicilio o instalación de paciente. Se trata de medir la tasa de saturación del paciente sin aporte de oxígeno desde hace al menos 10 minutos, y de tomar de nuevo la medida con oxígeno. Usted puede registrar sus resultados en un cuaderno que le permitirá seguir la evolución de su enfermedad, y hacer un seguimiento regular con su neumólogo. Normalmente, su nivel de saturación debería ser más alto cuando toma oxígeno. Si este no es el caso, o peor aún, si su saturación es menor con oxígeno, revisa tu instalación, si es necesario prueba conectando tu cánula nasal directamente a la fuente sin pasar por el humidificador o por una tubería.

En caso de duda o dificultad respiratoria, no dude en contactar rápidamente con su neumólogo o su médico. En caso de emergencia no tome un taxi para ir a la clínica, llame a una ambulancia: todas están equipadas con oxígeno que se puede administrar en dosis altas con máscaras.

L.D.